Cuente sus bendiciones al considerar estas prácticas financieras sólidas.
Por Chuck Bentle
El otoño es un tiempo que me quita el aliento por su belleza y por la oportunidad de refrescarme después del calor del verano. Y también es un buen tiempo para volver a los principios básicos de cómo manejar las finanzas.
Aquí encontrará una lista práctica
de 10 cosas que puede hacer ahora para entrar al camino de la libertad financiera. Solo por diversión, haremos como cuenta regresiva.
- Diseñar un presupuesto.
Un presupuesto le permitirá averiguar por qué siempre hay “mes de sobra” después de que su dinero se acaba. Preparar un presupuesto realista debería ser la base de todas sus decisiones financieras. Sin un presupuesto, sus objetivos financieros no son nada más que una ilusión.
- Regalar.
Establezca sus prioridades poniendo la generosidad en la parte superior de su presupuesto. Dios nos ha dado a cada uno la extraordinaria capacidad de dar. Y todos damos algo, aunque nos demos cuenta o no. Hasta las personas egoístas regalan su tiempo y dinero, ya que “adoran” las cosas que valoran. Una de las cosas más importantes, sino la más importante, que necesitamos recordar es que todo lo que tenemos le pertenece a Dios. Cuando damos, especialmente al trabajo del Reino de Dios, mostramos que valoramos al Señor por encima de todo. Así que, al abrir sus billeteras, le ayudará a aflojar la atadura que tiene el dinero en su corazón.
- Reducir.
No use sus tarjetas de crédito mucho. Al contrario de lo que ha escuchado, las tarjetas de crédito no son malas, pero su mal uso es un problema. Es por eso que es importante desarrollar auto disciplina. Si su problema es gastar fuera de control, rompa sus tarjetas de crédito.
- Controle sus gastos.
El gasto excesivo en indulgencias no nos sacará de una depresión. No es ningún secreto que para alcanzar la libertad financiera no debemos gastar más dinero de lo que ganemos. Pero aunque ya haga eso, siempre se puede mejorar. Tendemos a equiparar el gasto fuera de control con las compras grandes, pero a menudo son las pequeñas compras las que nos dejan con deudas.
- Ahorrar dinero.
El otro lado de gastar menos es ahorrar más. No hay trucos para ahorrar dinero. No es más que gastar menos de lo que gana y dejar dinero a un lado. Asegúrese de administrar sus ahorros, tal como lo haría con otros gastos. Piense en los ahorros como un dinero que se tiene que pagar usted mismo Ese dinero puede ser usado después para compras grandes o para cubrir gastos inesperados, esas emergencias de la vida que lamentablemente nos toman desapercibidos.
- Cocine sus comidas.
Una forma muy buena de gastar menos dinero es comer en casa más a menudo. Cocinar su propia comida le da un mejor control sobre lo que gasta en comida y como bono, mejor control de las porciones y las calorías que ingiere. Entonces, es una elección saludable por donde se le mire. Además de bajar de peso y bajar el presupuesto, usted podría llegar a disfrutar el cocinar. Si está casado, comparta las tareas previas a cocinar y si tiene hijos involúcrelos también. Incontables familias han descubierto el placer de cocinar y compartir una comida juntos cuando se hace en equipo.
- Súbase al auto.
Tome vacaciones locales este año. Unos años atrás cuando la economía tomó un giro negativo, las vacaciones en casa se volvieron muy populares. En vez de viajar a un lugar lejano y muy caro, las familias descubrieron cosas interesantes que hacer cerca de donde vivían. Sin el costo de los pasajes, hotel y arriendo de auto, usted tendrá más dinero para gastar con su familia en actividades que disfruten juntos. Donde quiera que esté, otras personas viajaran largas distancias para ver cosas cerca de usted.
- No trate de compararse con
otras familias. Ellos también tienen deudas. Hasta ahora, la mayoría de los temas en esta lista son sugerencias para cosas que puede hacer, o no hacer, para manejar sus finanzas, pero la libertad financiera no solo consiste en modificar su comportamiento. Para hacer que los cambios perduren, es importante examinar nuestros corazones. El libro de Eclesiastés dice que Salomón trató todo para alcanzar la felicidad a través del dinero y las posesiones materiales, pero falló miserablemente. Salomón aprendió que el secreto de la felicidad no reside en tener cosas, sino que en reconocer que Dios es nuestro proveedor y en cultivar un corazón agradecido.
- Pague su auto.
Algunas personas compran autos nuevos pero no consideran en su lista los gastos de mantenimiento. Si el automóvil sufre alguna falla, ellos se paralizan. Agregue el mantenimiento del automóvil en su presupuesto.Su meta debe ser tener el mismo auto por mucho tiempo, 10 o 15 años si es posible. Con el cuidado adecuado, tener su auto por ese tiempo no es imposible. Pero debe planear y presupuestar el mantenimiento adecuado.
- Ore antes de gastar.
El óptimo balance espiritual y emocional lo guiarán a la libertad financiera. Pídale a Dios que le dé la fortaleza y la disciplina para seguir los primeros 9 pasos. El Nuevo Testamento nos dice: “Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús” (1 Tesalonicenses 5:18).No se resienta por lo que no tiene, sino sea agradecido por lo que Dios le ha dado.