por Eric Geiger
En su libro Basketball on Paper: Rules and Tools for Performance Analysis [Basquetbol en papel: Reglas y Herramientas para el análisis de rendimiento] publicado en el 2004, el estadístico y aficionado del basquetbol, Dean Oliver, trató de usar el análisis estadístico de los equipos de la NBA para determinar cuáles son las acciones más importantes para ganar un partido. Su investigación identificó cuatro áreas clave que organizó por importancia con valores numéricos (en paréntesis). Él determinó que los equipos que hacían bien estas cosas ganaban partidos con más consistencia.
- Encestar un alto porcentaje de tiros de campo (10).
- No perder la pelota (5-6).
- Obtener rebotes ofensivos (4-5).
- Ir con frecuencia a la línea de foul (2-3).
¿Quiere saber donde enfocar la energía de su equipo para ganar con más frecuencia? Aquí está su lista de tareas. De acuerdo a su investigación, encestar un porcentaje más alto de tiros intentados es, por mucho, el indicador más alto de un equipo ganador. Un entrenador con acceso a este conocimiento sería necio si no planificara y entrenará con este primer indicador en mente.
En mi blog reciente Research Reveals the 5 Biggest Influencers on Your Child’s Spiritual Health [Investigaciones revelan las 5 influencias más grandes en la salud espiritual de tu hijo] compartí los hallazgos de un nuevo proyecto de investigación de LifeWay reportados en el libro de Jana Magruder Nothing Less: Engaging Kids in a Lifetime of Faith. La investigación mostró que el indicador número uno en la niñez de adultos saludables espiritualmente, por mucho, es la lectura regular de la Biblia. Aunque la estadística no es inesperada, sí es profunda, y así como con el análisis de Dean Oliver, seríamos necios si la ignoraremos.
Si somos padres, pastores o líderes de ministerios de niños, invertir en ayudar a nuestros hijos a desarrollar un hábito saludable de leer la Biblia cuando todavía están jóvenes es esencial. Estas son tres maneras en las que puedes preparar a tus hijos y a los niños en tu iglesia para el éxito.
- Asegúrate de que tengan una Biblia propia, apropiada para su edad.
Si tienen una Biblia que les gusta, los niños se animarán a leer lo que hay dentro. Hay muchas Biblias disponibles para niños de varias edades con diseños de portadas, estilos de ilustración y ayudas devocionales diferentes. Pastores y líderes de niños: consideren regalarles Biblias a los niños de parte de la iglesia. Padres: si tu hijo no tiene una Biblia apropiada para su edad, planea visitar una tienda LifeWay cerca de ti para buscar una Biblia especial para él. En cualquier caso, asegúrate de escribir su nombre y la fecha en el interior para conmemorar la ocasión.
- Lee con ellos.
Es importante que los adultos modelen la lectura de la Biblia. Profesores: sean intencionales en abrir sus Biblias cuando enseñan y reconozcan a los niños que traen sus Biblias a la iglesia. Denles la oportunidad a los niños de leer sus propias Biblias en la escuela dominical. Padres: ya sea que lean con sus niños a la hora de dormir o en el patio de la casa un sábado por la tarde, tomen el tiempo de leerles en voz alta de sus propias Biblias. Tu participación en la lectura bíblica ayudará a reforzar el valor de la Palabra de Dios y creará tiernas memorias del tiempo juntos enfocados en la Biblia.
- Incentiva a los niños a pasar tiempo solos en la Palabra de Dios.
Aún los niños que tienen el deseo de leer sus Biblias no saben dónde comenzar. Una de las mejores maneras de ayudarles a crear un patrón regular de lectura bíblica es proveyéndoles un plan de lectura diseñado para niños. Esto les ayudará a crear un ritmo, un patrón y consistencia. Uno de los mejores que hay es Foundations for Kids [Fundamentos para niños], por Robby Gallaty, el cual estamos obsequiando hoy. Foundations es un plan de lectura de 260 días para niños que lleva a los niños a través de varios pasajes de Génesis hasta Apocalipsis con el método H.E.A.R. El acrónimo H.E.A.R. (en inglés) significa Resaltar, Explicar, Aplicar y Responder.